Hacia Beijing 2008.

¿ Atractivo ?

Sí, si es atractivo.

¿Divertido?

Sí, si es divertido,

¿ Fresco ?

Sí, si es fresco.

¿ Relajante ?

Sí, bastante.

¿ Cansado ?

Cansadísimo. Nunca me pareció que fuera tan cansado el aprender a nadar y pues claro... a estas alturas del partido.

Según la edad no tiene nada que ver con el aprender a nadar, es decir: lo mismo aprende un niño que un adulto, sin embargo, es recomendable siempre aprender desde que eres un niño. Creí que el peso tenía algo que ver pero para nada, ya que hay varios chavos con más peso y nadan tan ligeros como si realmente fueran peces. El que realices alguna actividad deportiva de manera conjunta como el correr o el ejercicio del gimnasio te ayuda mucho para la condición pero por lo que entiendo y desde luego, nada tienen que ver con el nado. Definitivamente es otra onda.

No hay más que seguir las indicaciones del instructor, ser disciplinado, practicar lo más que se pueda, bajarle a los tacos y a las picadas e irte conociendo a ti mismo en el agua para que una vez en ella apliques las indicaciones del instructor y ahora sí, a nadar como pez en el agua.

Por lo pronto, debo confesar que estas primeras clases me han estado costando un wevo y casi la mitad del otro.

Ya te contaré como me seguirá yendo en mi nado hacia Beijing 2008 =).