23 años.

Me encontraba ya sentado en mi silla dentro del salon de clases cuando de repente sentí como el suelo se movia. Recuerdo perfectamente aquellos pinos que a lo lejos se mecían con el movimiento de la tierra y que fueron mi referencia inmediata através de la ventana del salon de clases. Estaba temblando.

No recuerdo más nada de ese día sino hasta que llegué a casa y mirar las noticias en donde pasaban imágenes de la desgracia sucedida en Ciudad México: Imposible olvidar las imágenes del anuncio del Hotel Regis tirado entre escombros, las imágenes de Jacobo Zabludovsky transmitiendo desde su otrara novedoso teléfono movil (de ladrillo) en su auto, la recurrente y derrumbada referencia "Lechería" y la frase de mi tío decir (al ver a un niño en la t.v.) "ja!, mira como desmorona esa piedra ese chamaco!" [por los nervios]. Yo lloraba y ahora, me conmueve recordar lo mismo.

Afortunadamente a nadie de nuestros seres queridos y cercanos en ese hermosa ciudad le sucedio nada serio aunque si, un gran susto. Sin ambrago muchos hermanos mexicanos no pueden decir lo mismo.

Increible que hayan pasado ya, 23 años.