Varios siglos antes de Cristo, Jerjes, el Rey-Dios del imperio persa, con un ejército de miles de soldados, se dirige a Atenas a pedir a los griegos que se rindan o serán aplastados. De camino tiene que pasar por Esparta, y envía a un negociador en su nombre para solicitar también su rendición (de manera algo arrogante según cuenta la historia). El Rey Leónidas se niega y se desencadena la guerra entre Esparta y el Imperio de Persia que dominaba el mundo, sin embargo a esa guerra el Rey Leónidas, por una serie de traiciones en la propia Esparta, no puede enviar al ejército completo a luchar, y para evitar la invasión de su tierra él mismo decide marchar a la guerra con a una tropa formada por su propia guarda personal, 300 valientes espartanos que lucharán contra miles de persas.
Asalto a la inmortalidad
-
San Enrique bendito del Corazón Sangrante
Si sigo actuando como ayer me quedaré más sola que un calcetín sin par.
¿Dónde lo habré dejado? Esa manía de l...
6 hours ago